Recordando la importancia de la ganadería extensiva, esencial para nuestro territorio

Presentado como el conjunto de sistemas de producción ganadera que aprovechan eficientemente los recursos del territorio con las especies y razas adecuadas, compatibilizando la producción con la sostenibilidad y generando servicios ambientales y sociales; la ganadería extensiva ha sido la protagonista del Curso de Pastoreo Sostenible celebrado por AlVelAl en la Puebla de Don Fadrique

Ganadería, fundamental para nuestro territorio, que ha sido tratada desde diversos aspectos por una gran variedad de expertos/as ponentes. En una jornada presentada por Santiaga Sánchez, ganadera y socia fundadora de AlVelAl y miembro de la Junta Directiva de esta, que defiende que “el paisaje es la mezcla entre la agricultura y la ganadería, no se entiende lo uno sin lo otro”. Para la de Chirivel, “No se puede entender la cultura, no se puede entender el medio ambiente, el entorno, sin lo que es la acción de la ganadería en extensivo”, forma parte de la cultura del municipio de la Puebla de Don Fabrique, lugar de celebración del curso.

El Pasto

Tratando la diversidad y complejidad del pasto, Ana Belén Robles, del EEZ-CSIC, experta en esta materia; habla de diferentes tipo de sistemas, como el silvopastoral y agrosilvopastoral, poniendo como punto central el pasto y su relación con el entorno, “este pasto del Altiplano es diferente al del resto de Europa, este es un paisaje más amarillo”, mostrando diferentes tipo de especies y sus propiedades como energía, proteína o valores nutritivos entre otros; que se encuentran en nuestros pastos. Plantas silvestres, flores,… y su importancia para restaurar, “ya que en el pasto tenemos las semillas”, remarca Ana Belén, enumerando un amplio número de especies y características.

Con una evaluación de la producción, Robles muestra que “se puede obtener el valor nutritivo del pasto, atendiendo a las necesidades energéticas de un animal”, apuntando que “la proteína y la fibra son importantes para la carne y la leche, al igual que la importancia de la digestibilidad, cuanto más digestible mejor, más energía; con estos datos puedes valorar si un pasto es bueno”. Encontrando pastos silvestres y también combinaciones con especies cultivadas, pudiendo crear un equilibrio en el pasto, ya que hay plantas que tienen más energía, pero menos proteína y viceversa. Todo ello sin olvidar la relación, pasto, ganado, entorno. Existiendo, apunta Ana Belén “diferentes mosaicos, dependiendo de la combinación del ganado con la agricultura y lo forestal.”

“Lo que tenemos aquí es muy diferente a lo que es la ganadería industrial”, continúa tratando el pastoreo con tierra y con pastor introduciéndonos en el tema de la carga ganadera y capacidad de carga sostenible, remarca que “es esencial un pasto, un pastor y un ganado, y que se ajuste la capacidad de carga ganadera con respecto al pasto. Capacidad de carga que se puede calcular teniendo en cuenta variables como el número de animales y energía del pasto por hectárea y año.

Una intervención en la que la biodiversidad también ha sido protagonista por la importancia de la ganadería en ella. “A lo largo de la historia la ganadería ha favorecido a la expansión de semillas y su posterior generacional, y también hay algunas especies de plantas invasivas y el paso del ganado ayuda a el equilibrio del pasto”. Un impacto del animal y el hombre en la evolución geológica y climática, sobre esta cuestión Ana Belén apuntilla “el deterioro del sistema la tiene el hombre, el ganado no tiene culpa, es el hombre el que tiene en sus manos la gestión del territorio…la explotación de los recursos del monte es algo de millones de años, por eso nuestro suelo responde tan bien a la acción del ganado”.

Entre los beneficios de un buen manejo de los recursos se han desataco la red de cortafuegos, surgida en el 2003 para abrir zonas horizontales con el pastoreo para crear la prevención de la propagación de incendios; así como el impacto de la ganadería extensiva en la biodiversidad y su papel a lo largo de la historia.

Agricultura y ganadería

“La ganadería se está industrializando, se están especializando y se están parcelando, pero lo más grave es que se están desconectado de la agricultura”, lamenta María Eugenia Ramos, que centra su ponencia en la relación entre agricultura y ganadería. Ramos, quien realizó su tesis en la finca de Los Morales sobre el impacto de labrar la tierra, la importancia de una buena cubierta vegetal y la importante función que cumple el ganado en diferentes zonas y con diversos pastos. “Los cultivos son también alimento para el ganado, aprovechando residuos hortícolas, el animal se lo va a devolver en forma de materia orgánica, fertilización y en forma de productos ganaderos”. Cultivos en los que también son importantes los arbustos, arboles forrajeros y setos vivos; que ayudan a fijar el suelo y delimitar zonas.

Tras tratar diversos cultivos, Mª Eugenia hace especial hincapié en los leñosos, en los que “el ganado nos ayuda a que no se nos desmadre la hierba, abona y favorece las leguminosas…el ganado tiene eso, la plantas que más consumen son las que más crecen y se conservan, a esto se le llama paradoja pastoral”.

Con respecto a esa relación entre cultivo y ganado la ponente explica que “los arboles le dan sombra y alimento al ganado, el ganado aprovecha el pasto y lo fertiliza, y el pasto protege el suelo y favorece la infiltración del agua”, un dato, este último, importante a la hora de hablar del pasto, de crear esa cubierta vegetal que protege del impacto de la lluvia y beneficia al cultivo, creando un suelo rico en nutrientes; y es que, “para que haya vida en el suelo tiene que haber un mínimo de cubierto vegetal”, destaca Ramos.

Cubiertas que pueden ser naturales o cultivadas “en los años lluvioso las cultivadas son las que más producen y en años más secos son las naturales… en las fincas con más historia ganadera, existen más leguminosas”, ya que estas son muy nutritivas para el ganado, haciendo mención a la paradoja pastoral que describió Ana Belén.

Manejo Holístico

Veterinario, socios de AlVelAl y Alejab, Andrés Fajardo ha sido el encargado de exponer en qué consiste el manejo holístico, cuyo objetivo es “Manejar el ganado, manejar los cultivos, la tierra, manejar la gente con la que contamos, aumentando la biodiversidad, teniendo en cuenta cómo afecta al medio ambiente, incrementando las producciones y mejorando la rentabilidad, y teniendo en cuenta la calidad de vida de la gente del campo, si queremos que se quede la gente en el territorio”.

Un manejo que consiste en tomar decisiones en la tierra “Planificar, verificar en un ciclo completo como ha afectado a la tierra, un continuo aprendizaje”, y es que para Fajardo todas las partes forman el entero, personas, ganado y terreno; una alteración de alguno de los elementos modifica el resultado. “Es importante ver la relación que tienen todos los elementos, como afecta, el pasto en el suelo, y cuanto pasto necesita el animal, y cuanta producción de animal tienes que a fin de cuentas es lo que quiere el empresario” apuntilla el veterinario.

Un manejo holístico que, según este no ha sido correcto en los últimos años “observando los procesos, sociales, económicos y ecológicos que estaban desarrollándose en el ámbito de la ganadería extensiva uno se da cuenta de que algo estamos haciendo mal, es que llevamos más de 100 años actuando con un pensamiento lineal, que se traduciría como la manera rápida de alcanzar nuestro objetivo… las grandes compañías sólo miran por sus intereses económicos y dejan de lado factores medioambientales, disminuyendo la calidad de vida de las personas del entorno”.

Una preocupación que va más allá de las actuales generaciones, la de dejar una tierra en la que las futuras generaciones puedan vivir con dignidad, pero también con esperanza “lo mejor es que si no lo hemos hecho bien durante los años pasados, es rectificar y rehacerlo de nuevo, para devolverle vida al suelo” remarcaba Andrés.

Para ello, señala, es fundamental entender la naturaleza y los ecosistemas “es muy importante saber manejar bien el ganado, la presión que hacemos en las ovejas para tener una buena respuesta en el suelo, tener una buena relación entre la planta, el suelo y el animal…también conocer que el tiempo es la clave de todo”.

Un manejo, el holístico que cuenta con herramientas como el fuego, el descanso, el pastoreo o el pasto; y su relación con los organismos vivientes del ecosistema. “Es un proceso de aprendizaje, que desarrollan las personas que trabajan en el campo y cambia el ritmo que tiene con la tierra y su perspectiva, una visión optimista en un sector plagado de malas noticias, que opta por la ganadería extensiva y el desarrollo rural, y atiende a la raíz del problema que sería la desertificación y la pérdida de capacidad productiva de los suelos”.

El punto óptimo

Este ha sido el tema tratado por Emma Martínez, ganadera que ha expuesto la experiencia de su finca, con olivos, almendros, frutales y parrales; entre otros. Una finca en la que se genera esa conexión ganado y cultivo.

Martínez comparte con los asistentes que en su finca se planifica todo, en busca del punto óptimo, “tenemos que saber cuándo entran las ovejas, cuanto tiempo pasan dentro y cuando las tenemos que sacar… entramos cuando las plantas que queremos que estén, están en su máxima expresión, si queremos semilla pues no les dejamos comer hasta que asemillen las flores, pasan las ovejas, comen y cuando la planta crece hasta que este nuevamente en su mejor momento para volver hacer entrar a las ovejas”.

Un manejo, el de Emma Martínez, cuyo objetivo es vender cordero de campo, de gran calidad, sin piensos y con lactancia materna, el resultado, un cordero segureño que cuenta con una calidad garantizada. Destination AlVelAl

El taller de pastoreo se enmarca dentro de Destination AlVelAl, un proyecto que, en tres años, asesorará a 130 agricultores y ganaderos para la puesta en marcha de agricultura regenerativas de suelo y paisaje que reducen la erosión, mejoran la fertilidad del suelo e incrementan la biodiversidad; para lo que también se desarrollan talleres y espacios para compartir ideas y experiencias en torno a este manejo.

De la misma manera, se asesorará a 60 restaurantes del territorio AlVelAl para el uso y visibilidad del producto local y de temporada a través de la elaboración de platos tradicionales y de vanguardia. Productos sostenibles que permiten una frescura óptima, una mayor trazabilidad, menor huella de carbono y un impacto positivo en la economía local.

Un proyecto que también contempla la creación de cadenas de suministro para ocho productos del territorio, almendra, miel, hierbas aromáticas, vino, cordero segureño, aceite y frutas y hortalizas. Acercando estos productos a los hoteles de la costa del levante español pertenecientes al grupo TUI; pero también a los turistas para que conozcan, a través del agroturismo sostenible, un manejo agrícola respetuoso con el medioambiente, degustándolos en su lugar de procedencia.